Tras el paréntesis de 2024 –en que tuvo que cancelarse por la aparición de la enfermedad de la lengua azul y su riesgo epidemiológico–, este año regresa la Fiesta de la Trashumancia al centro de Madrid, una convocatoria que llena de ovejas las calles de la capital en un evento entre histórico y lúdico, que reivindica el papel de la trashumancia al tiempo que acerca la vida del campo a la ciudad.


La fiesta, que se empezó a celebrar en 1994, nació como una forma de visibilizar el patrimonio que suponen las cañadas, cordeles y veredas, y de apoyar la aprobación de la nueva Ley de Vías Pecuarias, que ese año se estaba debatiendo en las Cortes Generales. En la actualidad, 22 ediciones después, la fiesta reivindica el papel de la trashumancia como herramienta de lucha contra el cambio climático.


Como cada año, el recorrido comienza en el Puente del Rey –Casa de Campo– para continuar por el Paseo de la Virgen del Puerto, el Parque de Atenas y la Cuesta de la Vega, hasta alcanzar la Catedral de la Almudena. Ya en pleno centro urbano, la comitiva continúa por la calle Mayor, Puerta del Sol y calle de Alcalá hasta finalizar en la plaza de Cibeles y el simbólico pago de 50 maravedíes por millar de ovejas.


El paso del ganado por el centro se realiza el domingo 19 de octubre entre las 10:30 h y las 14:00 h y, además de ser gratuito, regala imágenes únicas, no solo por lo insólito de ver cientos de ovejas en pleno centro de Madrid, sino por los grupos que las acompañan y sus actividades, desde recitales de música pastoril hasta caballistas, pastores –con sus correspondientes perros–, asociaciones de oficios…


La fiesta del domingo invita a numerosas actividades relacionadas con la trashumancia que comienzan el viernes 17 de octubre, desde talleres de hilado y afieltrado hasta cuentacuentos o la posibilidad de convertirse en pastor por un día, todos gratuitos previa inscripción. Además, exposiciones sobre el legado de las pastoras y la trashumancia como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.
La imagen que abre el texto es Fiesta de la Trashumancia de Madrid | EVG